mancias

N TU TRISTEZA ANIDA LA FELICIDAD QUE ANHELÁS
por César Bandin Ron el El Martes, 10 de agosto de 2010 a las 10:07
ORÁCULO DEL CIELO
(Ra'i) Ancestral juego adivinatorio de origen polinesio

Los antiguos consideraban a los oráculos como las formas más altas de adivinación, así como siempre se ha señalado a la poesía como una de las formas más altas de conocimiento. Pero no debemos imaginarlos, necesariamente, como ámbitos oscuros y misteriosos cuyos mecanismos están alejados de nuestra comprensión. El oráculo es casi una excusa, un camino, para que el “intérprete” perciba, vea, en el consultante sus miedos y motivaciones enmascaradas, y a partir de ello intente hacerle ver cómo revertir sus aspectos negativos y transformarlos en una nueva y positiva forma de existencia. Ahora bien: el que lee el oráculo debe saber escuchar; saber ver en la palabra y en el idioma corporal del consultante lo que que éste necesita decir; y debe también poder radiografiar el tipo de energía que emana de su interlocutor.

Cada uno puede forjar su propio destino: el oráculo nos ayuda a encontrar las estrategias que nos orienten a través de un sendero de mayor espiritualidad.

Uno de los enigmas con el que se enfrentan los estudiosos del tema es el gran número de aciertos que tuvo, por ejemplo, el legendario oráculo griego de Delfos. La fe en él, en aquellos días, era total. Al punto que, si fallaba en su vaticinio, el error se adjudicaba automáticamente a la interpretación de la pitonisa, y nunca a la propia voz del oráculo.

Sin llegar a esos extremos de incondicionalidad, sepamos que la fe en nuestra capacidad de cambio es imprescindible para construir el futuro que sentimos nos merecemos. No importa cuán tristes o vencidos nos sintamos, sólo contamos con esto que somos al día de hoy. Para revertir nuestra suerte y alcanzar la tan ansiada paz, sólo contamos con esto que ahora respiramos, aparentemente tan oscuro e insalvable.

Así que superá los malos sentimientos, deshacete de los malos pensamientos, y comenzá a quererte, a transformar lo feo en lindo, lo malo en bueno, lo viejo en nuevo.

El Oráculo del Cielo (Ra’i, cielo) es una antigua astromancia de origen tahitiano que por primera vez puede consultarse en Buenos Aires. En esta mancia el intermediario es nombrado metua ta:ne (padre, en caso de que sea un hombre) o metua vahine (madre, en caso de ser una mujer); todos términos provenientes de la lengua tahitiana.

Tres tiradas de 15 dados de 12 caras blancos, 12 rojos y 8 negros (12 animales simbólicos, 12 pares opuestos, 4 constelaciones y 4 juegos de colores…) dibujan el mapa del cielo bajo el cual te hallás en los días de la consulta. El Oráculo del Cielo (Ra’i) trabaja sobre la base de la interrelación de 4 agrupaciones astrales /la Constelación de la Orquídea, la Constelación del Cocotero, la Constelación de la Gardenia y la Constelación del Tamarindo/: a partir de la disposición interna de cada una de ellas predice tus circunstancias inmediatas.

Percepción, interpretación y orientación.

EL ORÁCULO DEL CIELO

Cómo acrecentar día a día el conocimiento de uno mismo, dejar de conflictuarse con las metas materiales y centrarse en lo trascendente de la existencia.

Más allá de su carácter predictivo, el Ra’i señala, advierte, esclarece zonas en conflicto, y te orienta en cuanto a la forma de comenzar a “pensarte” a vos misma/o y fortalecer tu caracter para afrontar probables cambios de dirección en tu vida. Todos poseemos la capacidad de construir el futuro que deseamos: aprendé a administrar y reorganizar tu energía para lograrlo.

Concentrate en lo que realmente sentís y deseás: tomá conciencia de tu potencialidad y de tus limitaciones. Aprendé a prever y enfrentar conflictos vinculados a todos esos intimidantes fantasmas cotidianos: los afectos, la salud, el sexo, el trabajo, el dinero, la figuración, la vocación…

Se vive mal, en permanente estado de insatisfacción, y esto engendra violencia interior.

> BUSCAR LO QUE SE DESEA Y DESECHAR LO QUE NO SE DESEA.
> AFERRARNOS A LO QUE NOS HACE BIEN Y ALEJARNOS DE LO QUE NOS HACE MAL.

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César Bandin Ron: "Mestre de Leitura du Ra'i" (Oráculo del Cielo), outorgado pelo Atelier do Sossego (2003), Armação dos Búzios, Rio de Janeiro, Brasil.
Miembro del "Cercle Magique du Papillon" (São Paulo-Marsella-Bristol-Buenos Aires), grupo de investigación y training en pensamiento mágico.